Al entrar desde un patio cubierto, se accede a la sala de estar, comedor y cocina, que se abren a un hermoso solárium. Una puerta que atraviesa la cocina invita a un hermoso solárium, que invita a relajarse un rato más con un café. La cocina fue cuidadosamente diseñada con un acceso al solárium y una barra frente a la sala de estar. Al final del pasillo encontrará un dormitorio y un baño, y luego el dormitorio principal con baño en suite. En el exterior, el jardín maduro es un cuento de hadas viviente: exuberante, colorido y rebosante de vida. Las mariposas bailan entre las flores, los colibríes tararean sus suaves canciones y los árboles frutales se extienden perezosamente hacia el cielo. Justo enfrente de un tranquilo parque, el cañón se despliega como un cuento de hadas a la puerta de su casa. Más allá del parque, el majestuoso Volcán Barú se alza a lo lejos, realzando la vista del jardín.